miércoles, 30 de diciembre de 2009

Lobo solitario

Las estrellas brillan aún más cuando no hay ninguna luz perturbando el oscuro cielo, lucen su genuina perfección y deslumbran a aquellos ojos que miran desde abajo. Estos, que solo se dedican a observar, son solo intentos fallidos de astro, su luz apenas penetra o parpadea en la amplia bóveda. Y por no tener luz propia para cegar la vista de los demás, están destinados a inundar la suya. Así, el agua salada se va, ella tampoco quiere malgastar tiempo con ellos, y escapa por el recorrido azul hasta tropezar con el suelo, finalmente se funde con él y sus hermanas. El sonido intermitente del frotar de las alas de un grillo se mezcla con el llanto de quien llora por impotencia, quien ve en su noche eterna el destello de lo que desearía ser. El bostezo de una boca que se aburre, el falso arqueo hacia arriba de esta, un gato negro que recorre la acera encharcada de la calle, un sueño que provoca un despertar empapado en lágrimas, indicios de que la soledad deja en el asfalto la mancha de su sombra. Ese que por dentro es perro que huye de la mano del humano por temor a ser estrangulado, seguirá teniendo alma de lobo solitario y ahuyará a aquella que comprende la pesadumbre, taciturna Luna que acaricia desde la lejanía al que ama, mientras la cara oculta llora por no ser correspondida. El que posee una mente simple solo albergará en su interior emociones sencillas, pero un cerebro complicado conlleva sentir cada sentimiento como cemento caliente en la espalda.

lunes, 28 de diciembre de 2009

2010

2005/08
En el tonto tejido rosa que no ocultaba ninguna arruga tras él, se plasmaba una sonrisa sincera y una mirada limpia que no guardaba secretos. Saltos, por encima de pequeñas piedras resguardadas en la corta hierba, con la vitalidad de un alma que empieza a respirar el aire que acaricia las hojas de un nuevo mundo encontrado. No hay ninguna pesadilla acechando el lecho, puesto que los sueños lo acaparan y lo defienden de cualquier amago. Desnudar hasta el último escondite que depara el virginal paraje, el gran objetivo que centra la excitante aventura, sin miedo. El temor ni siquiera había posado sus ojos en el deforme ser recién salido de las profundidades acuáticas, protegidas por el dulce abrazo de la pura inocencia. Aún así, su corta melena seguía mojada por esta.

Un apartado escondrijo se divisaba en la distancia, invitaba inofensivo a adentrarse en él. Tan atractiva era la idea de revelar ese desconocido lugar que la curiosidad burló a las dudas, y los torpes pies caminaron hacia él. Hasta el rincón más apartado de este fascinaba al absurdo y simple corazón de la pequeña criatura, los latidos seguían una pegadiza melodía de confianza, el aire era pulcro y vivaz en sus pulmones, su espíritu era embriagado por la exquisita, pero nociva, infusión impulsada hacia su garganta, desbordada por la comisura de sus labios y rescatada por la impaciente lengua.


2009/10

Los sollozos salidos de la temblorosa boca rebotan en el dorso de cada montaña. Toda lágrima que escapaba por el rosado lagrimal caía hacia el vacío, misma suerte que podía correr también su dueña. Todo bajo la triste mirada de un cielo color ceniza. De cenizas se habían transformado sus adentros, lo restos de una felicidad difusa incendiada por el fuego con el que jugó sin cautela. Recuerdos, miedos y complejos se enredan en su ya larga y seca melena. Se convirtió en cristal, no por su transparencia, sino por su estúpida fragilidad, ya que la opaca cortina cubierta de falsedad y disimulo envolvía tanto como adornaba su atormentado y débil interior.

Estaba ahí, al filo de un acantilado, inmóvil... Y entre susurros alzó la voz: " Aprendí a ser feliz, mediante palabras... solo palabras, pero estas son tan ligeras que huyen con el aire y llegan a ser afiladas hasta el extremo de rasgar tus entrañas como si fueran una fina tela. Ahora, que la felicidad y el amor son solo una estúpida leyenda urbana, imploro al viento que no envie ninguna bocanada de aliento hacia a mí... Pues hace que me columpie aún más en el borde. Sé que hay posibilidades de aprender a mecerme como una hoja tumbada sobre una cama de suspiros, pero aún más de que mi cráneo choque con el duro suelo mientras grito y maldigo mil lamentos a mi suerte"

viernes, 18 de diciembre de 2009

Sangrante aurícula izquierda

El sombrío lugar es envuelto por la corta falda del silencio, solo salpicada por el sonido de una acelerada respiración, propia del terror contenido. Se divisa entre la niebla, ramas secas y olor a azúfre una débil silueta maniatada. Aquella figura pertenece a una persona, aunque más parezca, por su rostro desfigurado del miedo, un pobre animal esperando ser desollado. El agua salada atrapa su vista e impide que pueda ver los sutiles rayos enviados por el Sol. El olor a putrefacto invade su nariz tantísimo, tanto que el mareo llega al extremo de crear una especie de emesis de diferentes emociones, deseos y miedos. El calvario impulsa a los dientes a morder su labio hasta que la lengua saborea su propia sangre. El marco es agotador, pero cuanto más se retuerce, más se clavan en su esqueleto las afiladas espinas de la incertidumbre. Los recuerdos se incrustan en su cuello y aborven el cálido líquido escondido en el frágil refugio que supone la aorta, degustan hasta la última gota, se relamen con terrible satisfacción y ella, por un momento, se deja llevar por el placer que le producen miles de colmillos entrelazados entre piel, fluídos y dolor. Aunque el organismo no dura demasiado sin la suficiente sangre... Y recae de nuevo.


Derrepente aparecen en la oscuridad dos ojos de color marrón que centran la mirada en su propio cielo nublado. Parece que ha despertado de nuevo. Antes de volver a retorcerse en contra de su carcel se percata, a pesar de la oscuridad, de los cientos de cardenales dibujados en su pálida tez. Lo que, en vez de llenar de agua de mar su mirada y de tierra su polvoriento corazón, provocó fuego en su alma y suficiente aire en los pulmones como para hacerse una promesa: "desde hoy mi sangre no será el alimento de ningún recuerdo, por mucho que dibuje una sonrisa en mi boca rota, si luego es sacudida por el puñetazo de tu absurda ausencia; por mucho que me haga sentir viva, si lo hace matándome. Firma su declaración con su mismo coraje y característico orgullo, virtudes que son más suyas que de cualquier otro ser.

A pesar de las quemaduras que se produzcan en las manos por el roce, seguirá tirando de la zoga hasta tener otra vez en ellas a su sangrante aurícula izquierda.

martes, 8 de diciembre de 2009

Habitación 193

Hasta el estúpido espejo del armario de la habitación 193 se ha olvidado de como era su rostro antes de ser cubierto de lodo. Ahora solo muestra la silueta taciturna de una yonqui, que en el césped del parque busca colillas que sepan a ti. Las paredes se estrechan cada vez más, cuando el mono retuerce su cuello y patea su estómago. Pasea por inercia por los pasillos del centro de desintoxicación preguntándose si algún día podrá salir de ahí. En la estructura blanca retumba tu eco hasta el extremo de rozar la demencia. En la esquina más oscura descansa su espalda y abraza sus rodillas, se lamenta por haber sido tan tonta, debería haber huido de aquella sensación enfermiza que le daba tanto mientras le quitaba la vida en silencio. Aquel vicio le había llevado a estar ahí agachada, sin nada más que hacer que no sea poner nombre a cada una de sus lágrimas.

Se asoma a la ventana y ve a una panda de niños jugando, ella también quiere jugar con los demás, pero está ahí castigada por haber preferido el fuego antes que una absurda pelota. Sube su mirada y se centra en el Sol. Maldito Sol, parece que siempre está sonriendo el muy presuntuoso, siempre tan deslumbrante... Ella solía ser así, o eso cree recordar, la verdad es que los recuerdos antes del proceso de desintoxicación se nublan por momentos. Se había olvidado de tanto... No solo de recuerdos, sino también de ciertas emociones. Está tan vetada después de todo lo ocurrido. Es un templo de hielo en pleno desierto. Y aún así, después de tanta desidia hacia ella, sigue deseando consumir. Sigue deseando morir de sobredosis, "no hay muerte más dulce que esa" se repite una y otra vez. No hay nada más bello para ella que la exquisita agonía de su garganta ahogada en el más delicioso brebaje, qué más da morir, si mueres con la lengua envuelta en el placentero sabor de tu narcótico favorito. Su piel se eriza solo de pensar en el roze de sus dedos contra el papel de aluminio.

Sí la vida es una muerte continua. Cuando sus pulmones expulsan el aire, espera impaciente que la intermitente muerte dure para siempre, pero sus ilusiones se desvanecen cuando los muy idiotas vuelven a introducir oxígeno en ellos. El corazón no deja de gritar en forma de latidos, solo para restregarle que aún sigue viva.

Derrepente despierta de su improvisado sueño, fija los ojos en la puerta blanca de su cuarto y lee, como tantas otra veces, el letrero con el número 193, donde primero te matan y quizás algún día te revivan. Solo quizás... Dependiendo del destino. Dependiendo de ella

domingo, 6 de diciembre de 2009

Lluvia ácida

Si el cielo empezara a oscurecerse, la cálida luz del sol muriera, las nubes se enrojecieran y su interior fuera colmado con el más terrible ácido. Probablemente la lluvia ácida resbalaría por mi piel arrasando hasta con el último poro, pero una pequeña sonrisa irónica se dibujaría en mi cara, puesto que el dolor que supondría que mi piel ardiera en segundos es un juego de niños comparado con el que me produce el amargo veneno que corre por mis venas. Cuando el ácido casi me conviertiera en un cadáver andante me preguntaría por qué aún sigo viva, por qué la mayoría de mi sangre esta esparcida en el suelo y aún así sigo consciente de todo, por qué si ni siquiera me quedan cuencas puedo ver con claridad. Llegaría a la conclusión de que debo estar lúcida por alguna razón en concreto... Derrepente vería salir algo de lo que queda de mi cuerpo, algo incorporeo, pero que puede ser visto. No tiene voz, ni siquiera tiene cuerdas vocales, pero sus crueles susurros congelarían lo que se supone que era mi espina dorsal. No tiene ojos, pero su mirada de superioridad se clavaría en mi esqueleto casi descubierto. No tiene boca, pues no tiene ni cara, pero su sonrisa me sonaría familiar.

Después de unos segundos mirándonos, él con prepotencia, yo con miedo, se plantaría a pocos centímentros de mi cara. Su frío aliento habría helado mi piel si en ese entonces aún tuviera. Pero el cuerpo se me helaría por otra razón, al tenerlo en frente de mí lo entendería todo. Él era una prolongación de mi cuerpo, aquella parte de mí, parte lugubre que se escondía en el hueco más oscuro de mis entrañas hasta que vió su oportunidad para escapar. Sabía que había algo lóbrego en mí, como todo ser humano, pero no sabía que pudiera ser tan terrible como para asustarme a mí misma. Más que asustar me estorbaría, me susurraría a cada segundo que soy mala, egoísta, egocéntrica, fría y prepotente. Todo sería más fácil si pudiera ser una simple víctima de la lluvia ácida, pero resulta que yo soy aún mas ácida que esta.

El viento se llevaría mis cenizas; mi sangre solo sería una mancha oscura en el suelo; el olor putrefacto se marcharía poco a poco; restos como dientes y huesos serían ocultados por la misma tierra. Y quizás, solo quizás, vuelva a nacer y ser una persona que adore sentir como sus pulmones se llenan de oxígeno.

sábado, 5 de diciembre de 2009

viernes, 27 de noviembre de 2009

Soledad por intravenosa

El ojo del huracán se ha quedado atrás en el camino. Las pesadillas vuelven a morder tu cuello de manera impaciente. El dolor te reconcome por dentro, ni tus tripas han sobrevivido después de tanta tortura. Por la espesa sangre de tus venas corre el más amargo veneno que ha probado ese pequeño cuerpo; los pulmones se esconden tras tus costillas con el temor de ser encontrados; la impotencia se aferra a tu pecho; tus dientes retienen la lengua con el objetivo de apagar un grito de socorro.

Desde que te inyectaron la soledad por intravenosa tu cuerpo ha pasado por todas las posibles fases, has guardado la verdad en el bolsillo, esperando olvidarte de ella como si se tratara de una simple moneda; has llorado más que nunca y aún más odiado; la autocompasión introdució su dulce ponzoña dentro de ti y ahora simplemente le has dado la vuelta a la tortilla. Te has dado cuenta que no estas rodeada de sombras. Estúpida, la sombra eres tú, ya que el defectuoso mecanismo que se encuentra dentro de ti deja mucho que desear. La madera está demasiado podrida como para soportar tanto peso. Aún fuistes más idiota cuando tuvistes las genial idea de domesticar tus emociones como si de animales de circo se trataran. Afronta que solo tienes dos opciones: acabar con todo o empezar de nuevo.

Solo por un segundo te planteas recurrir a la opción más fácil... Parece tan dulce, tan irremediablemente sencilla. Acabar con todo suena tan apetecible. Pero la toalla está demasiado alta y tú eres demasiado pequeña para tirarla. Final tan agridulce para una vida sin sentido.

jueves, 26 de noviembre de 2009

Es más el odio que la tristeza contagiada

Voz que azota a tu espalda mientras habla de sus pocas ganas de vivir, no, esta vez no es tu conciencia la que te atormenta. Hoy los gritos de horror son salidos de las cuerdas vocales de una garganta cercana a ti, cuando te viras a mirar visualizas una cara que reconoces, y que refleja tristeza podrida que inmediato se une con la tuya. Pero es más el odio que la tristeza contagiada, puesto que aquella maldita garganta no sabe callarse, no sabe tragarse su sufrimiento como tú habrías hecho en su caso y no es consiente de que la tenue, casi apagada, luz de su mirada se refleja en tu cara y se siente como un puñal ardiente en el cuello. Mientras tanto el fuego sube por tu estómago hasta que llega al esófago y grita sin ser escuchado, puesto que hacer ruido nunca te ha gustado. Aunque esta vez estaría bien matar los gritos de horror de esa estúpida garganta con gritos de odio.

Tan solo pides clemencia, o al menos un descanso... Un poco de paz. Los pasados momentos de felicidad se enturbian en torno a las sonrisas y gestos desenfadados, que un día fueron protagonistas de lo que ahora deberían ser buenos recuerdos, lo serían si no fueran por las ansias locas de que vuelvan. No hay nada más triste que recordar una sonrisa cuando estas cubierta de lágrimas. Y es que sus palabras escuecen como sal en una herida. Herida que recuerdo que te hicistes tu sola... Y que ahora no hay ni una persona que no meta el dedo en ella, inconsientes de ello, ya que nadie te conoce suficiente como para acertar en la diana queriendo. Tampoco tienen la culpa de ser tan idiotas y tú tan poco tolerante.

sábado, 14 de noviembre de 2009

Festín para las pesadillas.

La presión de su pecho se ha extendido hasta la espalda... Está empezando a volver a vivir, a volver a sentir... No, no es una buena noticia, no es precisamente bueno lo que está sintiendo...

21:40

Por fin ha acabado de estudiar, el día se le ha hecho eterno desde que se levantó por la mañana. La mañana supuso como siempre una gran tortura, no le es nada agradable despertar del único momento en el que es feliz. El único momento en el que la presión de su pecho desaparece, hasta que la luz del día se entromete en su habitación y como de costumbre susurra su cartacterístico ruido silencioso, que causa el principio de otro insignificante día. Estúpida mañana, siempre lo extropeas todo, ojalá no existieras.

Al acabar se le presenta por delante toda una noche libre para pensar, eso no es bueno. No es bueno para una persona como ella y menos hoy. Esta noche será un gran festín para las pesadillas... Como principal plato la placenta de nuevos sentimientos acabados de nacer. Como segundo el jodido susurro que no para de quejarse detrás de su oreja. Finalmente, como postre toda clase de complejos propios de una atormentanda adolescente idiota y sobre todo diferente... Demasiado diferente, más de lo que ella hubiese deseado.

23:27

Era de esperar que iba a explotar. Grita sin ser escuchada, puesto que hacer ruido no está entre sus preferencias. Era de esperar... Demasiada tormenta, demasiados sentimientos en un pequeño cuerpo que, en tan poco tiempo, ya se había acostumbrado a no abarcar ninguna emoción. Y hoy, justo hoy debían usar su cuerpo como campo de batalla para revolucionarse, hartos del ambiente de putrefacción en el que se encuentra su ama. Ambiente que le afecta tanto, nunca había sido tan receptiva. Aparentemente la presión de su pecho ha originado un agujero en él donde se almacena todo lo malo que encuentra en su camino.

1:09

Ahora simplemente se dedica a Intentar escribir sobre él, pero le es imposible. Demasiadas ñoñerías salen de su mente, suficientes para ruborizar a la reina de la ironía, título del que ha sido proclamada por decisión propia y del que desgraciadamente nunca podrá desprenderse.

miércoles, 11 de noviembre de 2009

Vivir no es sentir, sentir es vivir.

Vivir no es sentir, sentir es vivir.

Ajám, debe estar muerta... Su corazón late por pura tradición, su identidad se ha ido lejos... Es obvio a donde se ha ido, es normal... Lo más lógico. Lo más lógico para ella.

Sus ojos se abren como cada mañana, confudida por el sueño se pregunta qué día es hoy, al instante se da cuenta de que no sirve para nada saberlo, es una tontería cuando todos sus días son iguales: estúpidos, sin sustancia, inútiles, imbeciles... Cualquier adjetivo que signifique que su vida es una verdadera farsa vale. Da igual que sea sabado o lunes, para ella no supone ningún cambio, quizás ese día se eche unas risas y sonría... Sonrisa falsa, artificial e irónica. Irónica como todo en ella, se ha convertido en una gran maldita ironía: respira sin vivir, vive sin sentir. No tiene ningún indicio que indique que deba sentir, ella misma decidió suicidar sus emociones, no fue nada dificil. Mejor abrazar a la tristeza de una maldita vez, antes de ver como la felicidad se trasforma poco a poco en esta. Mucho mejor decirle adiós, aunque una parte de ella quiera que surja algo por arte de magia y que todo se arregle. Sabe que la magia no existe, lo imposible no se logra, el hasta luego aquí no pinta nada.

[...]

Como es de costumbre, su pequeño ánimo desvanece por la noche, donde los recuerdos se intesifican... El único momento en el que la sangre avanza mucho mas rápida impulsada por los, ya casi olvidados, violentos saltos de su corazón, no precisamente de alegría. ¿No querías emociones? Pués no te quejes, no especificastes que clase de emoción querías. Ya no llora, si lo hiciera se volvería en algo tan monótono que perdería su verdadero valor, prefiere dejarlo para ocasiones especiales. Acostada en la cama enfrente del ordenador teme irse a dormir, sabe que cuando se acaban las distracciones vuelven las pesadillas, esas pesadillas que ella misma quiso liberarlas... Las liberó desde el momento que decidió hacer borron y cuenta nueva, su estúpida cuenta nueva que se suponía que era lo mejor, se suponen tantas cosas...

Mira el reloj y ve apenada que son las 0:16, hora de dormir. Mañana será otro estúpido día más.

sábado, 7 de noviembre de 2009

Admitirla formalmente en tu vida.

Esta mañana desperté desorientada, no tenía el mínimo recuerdo de donde me podía encontrar. Cuando fui entendiendo los tonos anaranjados de mi habitación me invadió el aburrimiento y la odiosa rutina, como si se tratara de una persona de 50 años en vez de una de 16. Quizás he comprendido que ya no hay ninguna razón de peso para despertar...

He cortado la última cuerda que me ataba a la realidad, a vuestra realidad. Tarde o temprano iba a suceder, solo he adelantado lo inevitable. Ahora queda esperar a que el destino me arrastre entre las jodidas sombras. No voy a resistirme, no voy a actuar, ya no. A lo mejor deba dejar que despedacen mi cuerpo, es probable que eso hiciera que me alejara más. Quizás se esté mejor en un autismo finjido, cerca del suicidio emocional.

No encuentro fuerzas para ser Andrea, lo único que hago es cobijarme bajo el frío brazo de la autocompasión. Pierdo la esperanza de volver a ser ese alguien. Envejezco de golpe, por dentro me voy pudriendo con una rapidéz aplastante. Si las ganas de vivir se estan perdiendo ya ¿Que será lo que me deparará el futuro? Puede que ya no me depare nada...

La soledad, única amiga, puesto que si no puedes con ella mejor unirte y admitirla formalmente en tu vida.

Hoy dejo que mis propios buitres me despedacen, que despedacen este patético cuerpo que ha elegido el suicidio emocional como mejor solución y que ha desatado por propia voluntad a sus peores pesadillas.

martes, 3 de noviembre de 2009

Esclavo y amo.

Esclavos, esclavizados por nosotros mismos, de nuestros prejuicios y los de los demás. Esclavos de la ignorancia y estúpidez, tanto nuestra como de ellos. Nunca, NUNCA seremos libres. Intenta disfrazarte de despreocupación, quizás de el pego, pero sabes que solo es un maldito disfráz. Eres insconsientemente consciente de que eres un esclavo. Esclavo y amo, te esclavisan y esclavisas. Somos todos vasallos de la opinión, del pensamiento de los demás e incluso, a veces, del nuestro. Seguid gritando ¡LIBERTAD! Yo seguiré planteandome si en realidad lo somos, a lo mejor en algún aspecto sí, aunque tengo mis dudas sobre ello. Seguimos sintiendo el horrible dolor que producen los latigazos, originados por esas miradas, por esos susurros incomprensibles, pero te imaginas de que tratan.

Ahora no te hagas la víctima, te escupen y escupes mierda. Ni los buenos son tan buenos, ni los malos son tan malos. Aquí nadie se salva de salir escaldado, pero tampoco de ser verdugo. Cortamos cabezas continuamente, de una manera rutinaria, sin ni siquiera plantearlo. Puedes ir de "guay" por la vida, diciendo por ahí que tú llevas las riendas, que no hay nada que te límite: sigue mintiendote a ti mismo. Somos carroñeros por natulareza, devoramos sin piedad a lo diferente, a lo que nos desconcierta. Tememos a todo lo que sea contradictorio, tanto como ir a contra corriente. Podemos intentar soltarnos de las cuerdas que nos atan a nuestros amos, desear ser libres, incluso aparentar serlo, pero la libertad no existe. La libertad de la que yo hablo solo es un espejismo mentiroso, adulador e inalcanzable.

No me tomes por una pesimista estúpida, es más, te animo a intentar reducir tu esclavitud, pero con ello tu hipocresía.

sábado, 31 de octubre de 2009

Un año más

Un año más, un año que ha pasado con el título honorífico de haber sido uno de los peores. Un año caracterizado por las numerosas decepciones que han llegado una tras otra. No importa, ahora soy más fuerte. Más sensible, pero más dura. Un año más madura, como siempre rodeada de idiotas, con la diferencia de que ahora me doy cuenta de que lo son. Un año más podrida, lo admito, quizás este año sea el debido para levantar cabeza... Quizás ya lo esté haciendo y aún no me he dado cuenta. Un año más irónica, cada día debo sonreirle a la vida cuando se que ella solo se dedica a hacerme mohines, sonreirle aunque le guarde un grandísimo rencor, ella sabe porqué. Han pasado tantas cosas en un maldito año, ha dejado tantas cicatrices y seguramente seguirán siempre ahí recordandome mis errores y los de los demás, para aprender de los mios y evitar los ajenos.

Afortunada o desgraciadamente he aprendido lo que significa las palablas FAMILIA, AMISTAD y PUTOS ESTÚPIDOS SIN DOS DEDOS DE FRENTE, a base de palos, por supuesto. He aprendido más de los golpes que de los libros, estos solo me han mostrado la teoría, los golpes se la han saltado y me han enredado directamente con la práctica. Por ello descubrí que fui demasiado mala por querer ser demasiado buena, fui demasiado estúpida por querer hacerme la lista y fui lo más asquerosamente típico creyendome que era diferente.

Idiota ilusa, has vivido tanto de las ilusiones que te has quedado sin ellas y ahora lo único que queda es... Ni si quiera sabes lo que te queda. Lo único que queda eres tú y la cuestión de luchar o esperar. Demasiado impaciente para esperar. Demasiado orgullosa para esperar a que el destino lo arregle. Demasiado terca para pensar que él lo pueda hacer mejor que tú. Así que ¿Por que esperar a que te animen ellos con palabras falsas, si sabes que la única persona que puede ser sincera contigo misma eres tú y solo tú?.

Por último y como costumbre me queda hablar de aquellas odiosas sombras que lo único que saben es estorbar, voy afrontando que estaran a mi alrededor a lo largo de mi vida, pero recordad una cosa:
"Yo no estoy encerrada con vosotros, vosotros estáis encerrados conmigo"

viernes, 30 de octubre de 2009

Pues eso:

Bueeh, como tengo que subir un video (por actividades de estudio), ahí va uno de Nach


Busco una calma inalcanzable
la atmósfera aquí no es fiable
Quiero estar solo si solo todo estará bien,
que nadie me hable,
que no rompan este silencio, es mío
Hoy quiero sentir el frió,
vértigo que el mundo pare y me separe del cansancio de vivir así
harto de fingir excusas musas
siento huir de mí, cosas que viví
Esta cicatriz de traumas
desangra versos desalma el alma
Es mi verdad maldita,
Mitad genio mitad flor marchita
Que se apaga porque haga lo que haga
el premio no cambiara mi estado de ánimo,
es este sentimiento pésimo que me tiene pálido
Con mis colega no soy cálido
Ya no hay remedio,
preguntan qué sucede y me limito a mirar serio(...)

rosa espinada sangra a quien la toca
quise compañía y obtuve un monologo
quise un final feliz y me quedé en el prólogo(...)





lunes, 26 de octubre de 2009

Aquellos que aman con ironía.

Hoy me rindo, he intentado comprender vuestro rol, he intentado formar parte y he intentado confiar en vosotros, pero hoy me rindo.

Lo único que he conseguido entender es que no entiendo nada, no entiendo la simplicidad de vuestras mentes ¿Cómo algo tan simple me puede presentar tantas complicaciones? Sois jodidamente mediocres para todo, para sentir, para pensar y actuar por vosotros mismos... Pero misteriosamente os volvéis inteligentes y pícaros cuando se trata de hacerme daño, de decepcionarme continuamente, de tomarme el pelo como si fuera una maldita estúpida.

Cada día me reafirmáis con mas fuerza mi teoría: chica, confía solo cuando sea necesario, solo cuando necesites vomitar toda la basura que almacenas cada día y te aflije cada noche. Expresa tus sentimientos solo cuando sientas que no puedas más, ya que cuanto más sepan de ti, más fácil será que te hagan daño y abandonen, como ha sido y será siempre

"El que ama demasiado lo pierde todo, solo aquellos que aman con ironía lograrán la gloria"

Así que hoy desisto, desde hoy seréis simples sombras a mi alrededor, podré relacionarme con vosotros, puesto que hasta el mas podrido ser humano teme a la soledad, pero nunca amaros demasiado. Desde hoy solo amaré con ironía.

sábado, 24 de octubre de 2009

Entre la espada y la pared.

¿Cómo lo que empezó como un juego ahora puede ser una puta sentencia?

¿Cómo puedes hacerme tanto mal y seguir queriendote de esta manera? De esta manera tan enfermiza y que no nos lleva a ningún lado. Lo admito, tu no tienes la culpa, yo fui la que empezó el juego, fui una total estúpida. Nunca pensé que esto llegaría a ser tan odioso, un obstáculo que no me deja avanzar, que me hace estar estancada entre la espada y la pared.

Sí, lo he afrontado: esto es una BASURA ¿ Cómo hostias me meti en esto? ¿En que momento di el paso a este maldito juego? ¿Como fui tan idiota, tan absurda de pensar que esto no traería ningún inconveniente? Maldita la inocencia e inconciencia de mis pasados 13 años, que poco a poco me han ido pasando factura y que hasta hoy no había sido totalmente consciente de que seguir con esto es inútil, que lo único que me hace es daño.

Cada vez más podrida por dentro, con menos ilusión y con menos ganas de seguir, pero es que todo es tan complicado. ¿Cómo voy a romper con tantos momentos maravillosos? Hasta los peores recuerdos los guardo con cariño ¿Cómo voy a ser cápaz de decirte que estoy cansada? Soy una cobarde, siempre tan sincera y atrevida, y justo ahora soy cobarde. El miedo de no saber olvidarte me nubla aún más las ideas, de que pase el tiempo y que en mí todo siga igual, de que siga podrida y tú lo hayas conseguido. Maldita egoísta.

Pero es que no puedo, NO PUEDO. No puedo separarme de ti, jodida ironía, estamos tan lejos y justamente debo sentir eso. Debo sentirme tan apegada, tan unida, tan sumamente conectada a ti.

viernes, 16 de octubre de 2009

Desde mi acantilado.

Desde mi acantilado me pregunto: ¿En serio es toda tan surrealista?, ¿De verdad podéis llegar a ser tan subnormales? Quizás sea yo la que está por debajo de lo corriente, y en tal caso ¿Es bueno o malo? A lo mejor, la pregunta correcta es: ¿Me importa? No, no me importa lo que vosotros penséis, desde mi punto de vista vuestro concepto de lo malo y lo bueno es ridículo, ya que para mí carecéis de lo que yo llamo LÓGICA y luego tenéis el descaro de llamaros "racionales".

Sí, claro, peco de pesimista e inconformista, piensalo bien: ¿Merece la pena pensar que este cancer algun día se curará?, ¿Debo conformarme con ver la misma basura pasar todos los días a los pies de mi acantilado, sin ni siquiera poder decir el tantísimo repudio que, en ocasiones, me produce?

Sois sombras a mi alrededor, nunca podré visulizar vuestra silueta de una manera comprensible. Sois tachones borrosos en una libreta, hacéis que mi lectura sea pesada e incoherente. Sois un rebaño de ovejas, y una de ellas desvalida que, por culpa de tantos golpes, nunca podrá seguir el camino a vuestro ritmo y que desde hace tiempo se pregunta: ¿Por qué seguirlas, si voy detrás de ellas sin comprender sus berridos en la lejanía?.

No te comprendo, pero te tolero. Te odio, pero te necesito. Te oigo, pero no te escucho. Me hablas... Y asiento, pero en realidad me estoy preguntando: ¿Esto es real?

Apartada de vuestra realidad

Estoy yo... Y luego los demás. Ya he afrontado que nunca encajaré, nadie podrá entenderme jamás. Por mucho tiempo que conozca a las personas siempre seran extraños para mí, porque ni ellos me comprenden, ni yo los comprendo a ellos. Rodeada de gente, pero sola. Una extranjera en mi propia tierra. Destinada a ser una gran maldita ironía. Destinada a ser diferente, pero no por ello a ser especial. Destinada a observar la felicidad de los demás en un plano aparte. Destinada a no comprender nunca nada. Cada vez más apartada de vuestra realidad...